El verano es una época en la que el calor puede ser agobiante, pero también es una temporada ideal para disfrutar de los caballos y nuestra afición. Para poder seguir disfrutando de nuestra afición, simplemente tenemos que tomar una serie de medidas para mantener la salud de nuestros compañeros equinos.
Los caballos son animales sensibles al calor y pueden sufrir problemas de salud durante el verano si no se les cuida adecuadamente. Para ayudar a proteger a tu caballo del calor, asegúrate de que siempre tengan acceso a agua fresca y limpia. Y que no le de el sol al agua, lo recomendable es que este el agua en una zona donde tenga sombra siempre. Proporciona agua fresca y limpia en todo momento para evitar la deshidratación.
Proporciona sombra en el área donde tu caballo pasa la mayor parte del día.
También es importante que el equino, tenga sombra, puede ser una sombra artificial o una buena arboleda. Si el caballo se encuentra en un box debemos tratar de que este un lugar ventilado.
Suplementos para hidratarlos cuando hay altas temperaturas
Las piedras de sal o agua con sal en el cubo de beber son dos buenas opciones para proporcionar electrolitos en las horas de mayor calor. Si tu caballo no le gustan las piedras de sal del himalaya, puedes ponerle unas cuantas cucharadas de sal a un cubo con agua. Es preferible que tengan a disposición un cubo con agua fresca y el otro con sal.
Reduce la cantidad de trabajo físico durante los días más calurosos
Si tienes que montar a caballo durante el verano, hazlo temprano en la mañana o al final del día, cuando las temperaturas son más frescas. Además, asegúrate de que tu caballo esté en buena forma física y de que su dieta sea adecuada para las condiciones de calor.
Adecua la dieta a la temporada de calor. Ajusta la dieta de tu caballo según sea necesario para satisfacer las necesidades de energía y electrolitos en clima cálido.
No comes lo mismo cuando es invierno que es verano, para los caballos es igual. Por ello, es necesario que hables con tu veterinario y en la dieta de tu caballo, proporcionen más forraje y menos pienso.
Inspecciona regularmente a tu caballo en busca de signos de problemas de salud relacionados con el calor.
Es importante que vigiles a tu compañero equino, veas si puede sufrir deshidratación. Si esta comiendo bien, tiene alguna molestia.
Asegúrate de que tu caballo esté limpio y bien cuidado para evitar problemas de piel y mala salud en general.
En verano, se producen muchas dermatitis equinas, ya que el calor, los insectos y el ambiente cálido, favorecen la proliferación de problemas para la piel.
¿Qué puedo hacer para evitar esta dermatitis equina?
Los problemas en la piel de los caballos pueden ser causados por diversas razones, como la falta de higiene, alergias, infecciones o enfermedades. Es importante que los propietarios de los caballos mantengan una buena higiene y revisen regularmente la piel de su animal para detectar cualquier problema. Si se observa algún síntoma de problemas en la piel, es recomendable contactar a un veterinario para un diagnóstico y tratamiento adecuado.
Si tu caballo tiene problemas con los picores de los insectos, una buena opción puede ser una manta de verano, contra insectos, rayos uva … Tu caballo no pasará calor y evitaras las rozaduras al revolcarse o estar rascándose constantemente.
En la actualidad, existen algunos productos que pueden ayudar a evitar los problemas y picores en verano como:
